Cómo preparar encausto paso a paso
Preparar encausto es bastante sencillo, sólo requiere que sepas bien los pasos para que no tengas complicaciones. La pintura de encáustica, o encausto, es una técnica pictórica en la que se aplica una mezcla de cera, resina y solvente sobre un soporte rígido. Es una técnica virtualmente eterna, algunas de las obras de pintura más antiguas de nuestra era fueron hechas con ella.
Esta técnica pictórica fue empleada por primera vez por los egipcios del siglo primero para pintar los retratos de las tumbas funerarias. La pintura encáustica es una de las técnicas más versátiles y, en los últimos años, ha sido utilizada de distintas maneras permitiendo la aparición de nuevas técnicas de pintura encáustica.
En el siguiente artículo te hablaré sobre cómo preparar encausto y cómo utilizarlo.
Analizaremos:
- Los materiales que se necesitan para preparar encausto.
- Cómo preparar encausto.
Al final del texto colocaremos enlaces a textos donde encontrarás temas complementarios:
- Cómo y en qué proporción se mezcla el encausto con pigmento.
- Cómo y con qué se aplica el encausto.
- Qué diferencias existen entre el encausto suave y el encausto duro.
- Cargas y otros materiales que se emplean dentro de la técnica de encausto.
- Con qué otras técnicas puede mezclarse el encausto.
- Imprimaturas ideales para la técnica de encausto.
En este texto nos centraremos principalmente en el encausto aplicado en frío, que es el que utilizamos en ttamayo. Este tipo de encausto no requiere de barras pre hechas, ni de una plancha caliente para ser trabajado. Por lo mismo permite un abanico diferente de posibilidades y, a nuestro parecer, más amplio.
Breve historia de la técnica de encausto
La técnica de encausto o encáustica es una técnica milenaria redescubierta a principios del siglo XX. Ha sido aplicada en algunas de las pinturas más famosas, tales como los retratos mortuorios del Fayum. Estos retratos han fascinado a través de los siglos, tanto por su calidad figurativa como por su técnica única.
Los retratos del Fayum fueron estudiados por distintos pintores durante el Renacimiento. Entre ellos Leonardo da Vinci, quien intentó reproducir la técnica de encausto, sin éxito.
A principios del siglo XX la técnica fue redescubierta por Diego Rivera, para ser utilizada de ahí en adelante por una gran cantidad de pintores modernos y contemporáneos.
Tipos de encausto y sus características
Por ser una técnica a base de cera, también se le puede considerar una técnica densa. Sin embargo, el encausto puede aplicarse de muchas maneras. A pesar de esto, muchos consideran que su aplicación resulta complicada en trabajos de alta precisión, siendo así utilizada principalmente en la pintura abstracta y en la semifigurativa. Sin embargo si puede utilizarse en pintura figurativa.
Por otra parte, el encausto puede aplicarse de dos maneras diferentes: al frío y al calor. A continuación te hablaré de las características de esta técnica para ambas aplicaciones.
Encausto en frío
- El encausto en frío a primera vista parece ser un material tan denso que no necesariamente es ideal para hacer detalles delicados. Sin embargo este puede volverse más fluido con el uso de esencia de trementina. Al encausto que tiene mayor cantidad de trementina se le llama encausto suave.
- Al ser pastoso se dificulta trabajarlo con pinceles suaves, por lo que es preferible usar espátulas para manejarlo. No obstante el encausto suave también puede ser trabajado con pinceles de cerda.
- La encáustica trabajada en frío requiere ser cauterizada con calor al finalizar el cuadro, lo que complica lograr alta precisión si no se sabe emplear cargas en ella.
- La cauterización de los cuadros realizados con esta técnica se lleva a cabo mediante sopleteado o cauterizado con pistolas de calor a alta temperatura. De no tomarse en consideración este paso, el encausto no penetrará en el soporte. Esto ocasionará con el tiempo, endurecimiento de la película de cera de manera separada del soporte y por lo tanto, el desprendimiento del soporte y la pintura.
Encausto al calor
- El encausto al calor se trabaja con barras de encausto premezcladas con pigmentos, las cuales son reblandecidas en una plancha de metal que se calienta.
- Al ser reblandecida la cera se vuelve muy fluida y es fácil aplicarla con brochas de pelo suave.
- Sin embargo esta técnica debe ser trabajada con gran velocidad, puesto que el encausto seca rápido.
- Esto no permite mucho tiempo para hacer retoques ni detalles.
- Una ventaja del encausto al calor es que no requiere ser cauterizado al final y que aparte no se emplean solventes durante el proceso de trabajo, cosa que puede ser positiva para quienes sean sensibles a los mismos.
- Un problema que puede tener este tipo de encausto, es que las barras premezcladas que se encuentran en el mercado no tienen una alta saturación de color, lo que nos da menos control sobre nuestro resultado.
- Por esto, si se quiere trabajar este tipo de encausto, es recomendable hacer sus propias barras.
Preparar encausto al frío paso a paso
Los materiales para preparar encausto
Para preparar encausto lo primero que requieres son los materiales correctos, estos son:
- Esencia de trementina
- Goma copal y damar (en forma de barniz).
- Cera pura de abeja.
Esencia de trementina
La esencia de trementina es el solvente que se emplea para preparar encausto. Es importante que no se use aguarras sintético, debe ser trementina natural. Si se emplea aguarras sintético las películas de encausto se debilitarán con el tiempo y se caerán del lienzo.
La trementina es esencial para preparar el barniz que se empleará en el encausto, así como también para trabajar con el encausto ya preparado.
Resinas para preparar encausto
La técnica de encausto, como la recreó Diego Rivera incorpora resina copal pura. En México le decimos resina copal o resina de copal, y estas provienen de diferentes árboles, sin embargo la única que nos sirve para este fin es la resina copal de pino.
Si se emplean otras resinas, por ejemplo la que viene del árbol de copal, el encausto no servirá. La resina copal de pino tiene una gran capacidad de anclaje, de tal manera que la vuelve ideal para esta técnica.
Otra resina que puede emplearse para preparar encausto es la resina damar. Sin embargo, es ideal agregarle a la misma un poco de resina copal o de lo contrario el encausto sólo podrá emplearse de forma delgada. La resina damar no es tan resistente como la resina de copal, por eso no es ideal emplearla de manera única para esta técnica.
Características de la cera para preparar encausto
Es importante señalar que por sus características, es mejor utilizar la cera pura de abeja que aquí menciono, ya que sí no empleas la cera correcta, tu encausto tendrá muchos problemas.
Cera sin miel
La cera correcta es cera pura de abeja completamente libre de miel y también de parafina. La cera de abeja en su estado natural tiene miel y comunmente se encuentra más en el mercado. Para limpiarla hay que hervirla varias veces. Al hervirla no se quedará toda la miel en el agua, debido a esto debe hervirse un par de veces más hasta que esté completamente pura.
Si no se quita toda la miel a la cera, nuestro encausto nunca secará al ser aplicado sobre un lienzo. Esto hará que el calor lo derrita y gotee donde sea que esté siendo exhibido.
Cera con parafina
Existen muchas ceras que no tienen miel en el mercado, pero que por desgracia contiene parafina. Estas ceras tampoco nos sirven. Si se emplean estas ceras para preparar encausto, este se craquelará fácilmente sobre nuestros lienzos una vez que sequen. La parafina es muy quebradiza y por ser una cera sintética no se lleva del todo bien con la cera natural.
Contando con la cera más adecuada, debemos considerar que para nuestro encausto en frío necesitaremos un volumen de cera y un volumen total de los barnices. Esto es: un volumen de barniz copal y un volumen de barniz damar.
Procedimiento para preparar los barnices
Barniz copal
Ya que se tienen los materiales para preparar el encausto, se debe realizar primero el barniz.
El barniz copal se prepara con un volumen de resina copal y un volumen de esencia de trementina.
Se coloca copal en un frasco grande, de preferencia que tenga tapa y que sea de vidrio o un plástico adecuado para manejar solventes.
Es recomendable colocar una bolsa de malla cerrada (una media es buena opción), dentro del recipiente. En esta bolsa de malla es donde colocaremos la resina. Ella será útil para retener la basura que tenga la resina (ramas, hojas entre otros residuos), y así filtrar mucho más fácil nuestro barniz.
A continuación, hay que agregar en el mismo recipiente la cantidad igual de trementina (en volumen) que de copal. Se deja toda la noche o incluso algunos días, hasta que el copal se disuelve por completo. Es importante que la trementina cubra por completo la resina, de lo contrario esta no se disolverá.
Un volumen quiere decir una medida igual en espacio de ambos materiales. Casi todas las técnicas de pinturas se crean con volúmenes y no con gramos. Esto se debe a que en las épocas dónde las mismas se desarrollaron (muchas de ellas hace siglos), no era tan común tener básculas y las medidas de peso podían variar de región a región, debido a eso la medida son los volúmenes.
Una vez se haya terminado de disolver, se debe colar el barniz puesto que tiene muchas impurezas. Lo ideal es colarlo utilizando una media o pantimedia. La tela de estas es muy delgada y permite extraer todas las impurezas.
Barniz damar
El barniz damar se prepara de la misma manera, pero en vez de un volumen de trementina requiere 2 volumenes.
Este barniz también debe ser colado de la misma manera al finalizarlo.
Dicho esto, si honestamente te da flojera preparar el barniz también lo puedes comprar ya preparado. Nosotros lo vendemos, lo encuentras en la sección de productos/barnices y barnicetas.
Preparar encausto - unir todos los ingredientes
Para preparar el encausto es necesario tomar dos partes iguales de barniz damar y barniz copal para unirlos. Juntos contarán como el volumen de barniz para nuestro encausto.
A ello le agregaremos un volumen de cera y posteriormente calentaremos todo para unirlo.
Calentar el encausto
Para calentar el encausto debemos ser precavidos, por eso mismo en esta parte del proceso es importante usar una palangana muy amplia.
Esto se debe a que la trementina del barniz se evaporará al ponerla al fuego, asimismo comenzará a fluir hacia los costados de la palangana. Si nuestra palangana es pequeña y la trementina queda cerca del fuego, todo nuestro encausto se prenderá en llamas.
Si esto ocurre, es muy importante tener cerca una tapa del mismo tamaño de la palangana para cubrirlo y extinguir el fuego. NO LO INTENTES APAGAR CON EXTINTOR. Sí lo intentas, la trementina y la cera derretida brincarán por todo el lugar en que estés preparando el encausto. Esto podría tener consecuencias fatales e incendiar el lugar.
También es muy importante que prepares el encausto en un lugar bien ventilado, ya que la trementina puede ser muy agresiva si te encuentras en un lugar cerrado y tremendamente dañino a mediano plazo.
Sin embargo, si preparas el encausto con las precauciones necesarias no tienes por qué tener ningún problema al prepararlo.
El encausto se debe calentar con flama baja. Una vez que se derrita la cera por completo tu encausto estará listo. En ese momento debes retirarlo del fuego.
También te recomendamos envasar el encausto de inmediato, ya que al enfriarse te costará más trabajo hacerlo, puesto que su consistencia en lugar de ser fría se volverá pastosa.
El encausto ya preparado
Con tu encausto ya preparado podrás comenzar a pintar cuanto antes. Lo único que necesitas es agregarle pigmento y en ocasiones más trementina para comenzar a pintar.
También puedes agregar cargas a tu encausto para volverlo menos fluido sobre el lienzo.
Si te interesa saber más sobre cómo utilizar tu encausto ya preparado, te recomiendo los siguientes textos de nuestro blog.