Sienas
Pigmentos como las sienas son tierras muy delgadas que, a causa de la sedimentación de la región en que se encuentran, poseen mayor cantidad de silicatos finos. Esta peculiaridad hace que dichos pigmentos sean traslúcidos y delgados. Durante el renacimiento y en épocas posteriores, tales características hacían que las sienas tuvieran gran valor para los pintores. Su delgadez permitía hacer fondos vibrantes o lejanías que aparentaran ser sumamente distantes. Así mismo, otorgaba la posibilidad de realizar veladuras luminosas que, gracias a las sienas, podían permanecer traslúcidas, siendo a la vez muy tintantes.
De entre los distintos tipos de tierras, las sienas son las más transparentes. Tradicionalmente éstas eran extraídas de las proximidades de Siena en la Toscana italiana. Sin embargo, desde 1930 los yacimientos fueron agotados y la fuente de pigmento fue suplantada por otras regiones de Italia como Sicilia y Cerdeña. Las sienas son de los pigmentos con mejor estabilidad y permanencia; hoy en día muchos fabricantes de pigmentos seguimos utilizando tierras que, aunque no provienen de Siena, poseen características similares. No obstante, muchos fabricantes comerciales producen sus pigmentos siena con colores sintéticos modernos (PY 42) y óxidos (PR 101, entre otros) que aunque imitan el color, no poseen todas las propiedades del pigmento.
Entre las sienas naturales existen sienas amarillentas, rojizas, naranjas, rosas y muchas más. Existen también un tipo de sienas muy comunes conocidas como sienas tostadas, que poseen tonos más rojizos que las sienas naturales. Como su nombre lo indica, son sienas que fueron, literalmente, tostadas. El proceso del tostado hace que el óxido de hierro que contienen se convierta en hematita. De ahí adquieren su color rojizo, sin perder sus demás características.

Ocres
El componente que da a los ocres su color es el hidróxido de hierro, que puede ser encontrado virtualmente en cualquier parte de la superficie de la tierra. Por lo general, hay grandes concentraciones del mismo en áreas húmedas cercanas a ríos, fondos de lagos o en pantanos. Hoy en día existe una gran variedad de pigmentos óxidos, muchos de los cuales son extraídos directamente de la tierra, mientras otros son procesados a partir de desperdicios industriales de metales. Muchos pintores llamamos a los colores de los pigmentos óxidos por el nombre de ocres, sin hacer distinción. Sin embargo existe - como pigmentos - una diferencia importante entre unos y otros.
Cuando se extraen de la tierra, los pigmentos ocres naturales contienen también otros compuestos químicos. Por lo general incluyen un color principal (óxido pulverizado), un color secundario (óxido igualmente) y arcilla. Éste último elemento juega un papel de gran importancia en las características finales del pigmento. La arcilla principalmente está hecha de silicatos, pero en ella se encuentran muchos otros compuestos. Éstos pueden variar tremendamente de región a región, cambiando su composición drásticamente.
Las variaciones en su composición influyen considerablemente en la apariencia de los colores al ser utilizados para pintar. Incluso aunque tengamos tonos idénticos, si su composición es distinta refractarán la luz de manera completamente diferente. Unos serán muy opacos, otros lustrosos; algunos más o menos traslúcidos y algunos tendrán al secar una apariencia similar al terciopelo. Esta característica de los ocres naturales hizo durante muchos siglos que los de ciertas regiones fueran particularmente valorados por los gremios de pintores. Dichos pigmentos poseían composiciones afortunadas, ideales para ciertos procesos técnicos que eran sumamente valorados por los pintores de la época.

Óxidos
Pese a que los ocres están pigmentados con óxidos, los pigmentos a los que llamamos óxidos en la actualidad son generalmente fabricados artificialmente. Dichos pigmentos poseen colores similares a los de los pigmentos ocres, mas tienen la característica de ser sumamente cubrientes. Colores como el legendario Bold de Armenia son pigmentos óxidos muy finos y cubrientes: éste en específico se utilizo como fondo para dorado por varios siglos en la pintura europea.